Amor mío, me regalaste una hermosa fiesta por nuestro enlace civil y te doy muchas gracias por ese bello momento, pero más que nada gracias por estar, por ser y por amarme. Yo igual pienso que ahora las cosas no cambian sino que siguen como hasta ahora, mejorando día con día. Me encanta ver que nuestros proyectos empiezan a realizarse aquellos que tanto planeamos o deseabamos que llegara el momento. Ayer me confesaste que tu mayor miedo es el de quedarte atrás en el matrimonio y yo te confese que el mío es el de cerrarme, pero prometimos ayudarnos mutuamente a que esto no pasara, porque para eso decidimos estar juntos, para apoyarnos, para cuidarnos, para ayudarnos a ser mejores y para formar un camino juntos. Dijimos que no olvidariamos esto. Ante la sociedad estamos ya casados este momento de manifestar nuestro amor y deseo de compartir y crear una vida juntos, ha sido uno de los momentos más bellos de mi vida. Gracias Diosito porque nos has permitido estar juntos.