Si nada en nuestras vidas sucede por casualidad, mucho menos en la vida de Aquel que vino al mundo para lavar nuestros pecados con su sangre.
Cristo debe haber pensado bastante cuál era el primer milagro que debería realizar. Debe haber tomado en cuenta la cura de un paralítico, la resurrección de un muerto, a expulsión de un demonio, algo que sus contemporáneos consideraran como "una noble actitud"; al fin y al cabo, era la primera vez que iba a mostrarse al mundo como el Hijo de Dios.
Y está escrito: su primer milagro fue transformar el agua en vino para animar una fiesta de casamiento.
Así como para buscar esposa para Isaac se le pidio guía a Dios y llegaron a Rebeca; y así como Tobías pidio a Dios poderse unir a Sara. Te doy Gracias Dios por guiarme a Julio y permitirnos amarnos de está forma, te pido me permitas unirme a él en matrimonio y que bendigas nuestro amor para formar la familia que esperas y que el uno con el otro seamos el apoyo para llegar a ser lo que esperas en cada uno de nosotros.